La vida y el currículum vitae de Alfredo Narváez Ochoa es como un libro abierto, aunque de solo una página, su blog lo dice todo, y se sabe que no es periodista, pero eso no le ha impedido haber vivido del chayote, del fraude, la extorsión y cometiendo peculado como “aviador” en el CEEPAC y ahora como “director” ilegal del Centro Cultural Mariano Jiménez, un centro cultural “patito” pero que le paga 32 mil mensuales.