En el periodismo potosino se dice que “los salarios son bajos pero se compensan con el chayote”, de poco sirve estudiar cinco años la carrera de LCC si un “franelero” gana hasta 30% más que un periodista y un chofer de bus urbano gana el triple; Hay excepciones, el corrupto monero del diario Pulso, Alfredo Narváez Ochoa, con solo estudios de secundaria gana 32 mil pesos mensuales en un puesto oficia ilegal y ni periodista es, solo dibuja monitos.