A diminuta
escala, pero Alfredo Narváez Ochoa es un reflejo de la rampante corrupción
mexicana, en es estrato superior un presidente y su casa blanca regalada por
Grupo Higa; gobernadores como Javier Duarte desfalcando $50 mil millones; en
SLP el alcalde Ricardo Gallardo regalando más de 60 millones a Sandra Sánchez
Ruiz. Narváez Ochoa se ha embolsado no menos de un millón en los últimos 6 años
en sueldos “fantasma” y chayote