De acuerdo al editor del diario Pulso
Jaime Hernández, “un empleado de Walmart gana más que un periodista potosino”,
tampoco tienen vacaciones pagadas, ni séptimo día, ni les pagan horas extra, ni
mucho menos reparto de utilidades (en cuyo caso serian millonarios). Pero
compensan esas carencias cobrando chayote y con sueldos de “aviador” en dependencias
oficiales, un caso extremo es Alfredo Narváez Ochoa.