Aunque Alfredo
Narváez Ochoa no tiene que ir al diario Pulso a hacer una caricatura que solo
le toma 20 minutos para elaborar, como “aviador” en el CEEPAC solo se presenta
cada 15 días a recoger su ilegal sueldo, o sea que todos los días se la pasa de
baquetón en su casa, la única que trabaja es su esposa.