Tuesday, January 5, 2016

CUANDO LOS PERIODISTAS SON LOS CRIMINALES

Me parece una incongruencia que precisamente el 4 de enero, Día del Periodista, hayan decidido algunos empleados del diario Pulso, encabezados por el monero Alfredo Narváez Ochoa, lanzar dos ataques cibernéticos en mi contra.
Incongruente también porque dicho diario es propiedad de los hermanos Miguel y Pablo Valladares García, propietarios también del diario electrónico Sin Embargo, supuesto critico de la corrupción y auto proclamado defensor de la libertad de expresión.
 Incongruente porque Sin Embargo fue víctima de dos ataques cibernéticos, uno evitando que se abriera su página, y otro por medio de usuarios falsos con una campaña de desprestigio contra sus periodistas.
Vi, con particular interés, las gráficas de Articulo 19 México, referentes al Día del Periodista, en el que, dice Articulo 19, nada se celebra: “Hubo 88 periodistas asesinados, 16 desaparecidos, 55 ataques a medios… no se celebra, se trabaja con miedo”.
¿Y qué hacer o qué decir cuando los ataques los perpetran periodistas?
Ya antes había yo publicado algo similar acusando, con sobradas pruebas y razones, a empleados del diario Pulso (encabezados por el monero Alfredo Narváez Ochoa) de intentar acceder a mi cuenta de correos de Gmail.
Este “Día del Periodista”, esas mismas personas, utilizando el sistema de computación de Pulso (incluyendo su servidor o cerebro central, por supuesto) intentaron “clonar” mi página de Facebook y lograron el cierre temporal de mi cuenta de Twiter, la que afortunadamente logré restablecer.
El origen de tales ataques son mis continuas críticas al periodismo potosino, sin que sea mi deseo señalar a un medio en particular, la simple razón es que Pulso es el más prolífico en publicar barbaridades.
O quizás los atacantes quisieran congraciarse con Miguel Valladares, ya que hace dos años hice público, en varios medios que reproducen mis columnas, el caso de Miguel Valladares en el que quedó a deber una cantidad importante de dinero a un grupo de reconstructores de yates de la ciudad de Coral Gables, estado de Florida. Publiqué lo que en México, particularmente en San Luis Potosí, nunca se hubiera publicado; los detalles de la embarcación, fotografía de la casa de Miguel Valladares en La Florida, dirección y otra información referente a este fraude.
Seria largo mencionar con más detalles lo que he escrito sobre Pulso, Sin Embargo y otros diarios de Editora Mival, por lo que incluyo el URL de mi blog Periodismo Verdadero: http://periodismo-verdadero.blogspot.com/
Repito la palabra “incongruente”, porque así resulta por provenir de quienes menos se espera y que me resisto a llamarles colegas.
(NOTA: El primer ataque a mi correo electrónico fue perfectamente documentado, con copias de los comunicados que me envió Google y que identificaban la dirección IP del diario Pulso)