Por seis
años de su gobierno, Alfredo Narváez Ochoa se ensañó con el panista Marcelo de
los Santos, dedicándole no menos de 300 caricaturas, muchas de ellas pasándose
de inmorales en el texto como en el dibujo, sin embargo al priista Fernando
Toranzo, por cierto peor gobernador que Marcelo, no le ha dedicado más de una
docena y todas ellas benignas o inofensivas.